ReMag y ReMyte para ayudarnos a equilibrar la tiroides
La mayoría de los médicos se sienten abrumados ante la complejidad de los trastornos endocrinos relacionados con la tiroides, las glándulas suprarrenales y las hormonas sexuales, por lo que remiten a sus pacientes a un endocrinólogo.
Sin embargo, estos especialistas basan, con frecuencia, su trabajo en análisis de sangre inexactos que les llevan a recetar medicamentos sintéticos para la sustitución hormonal, que constituye su principal forma de tratamiento.
En otras palabras: no se lleva a cabo el menor esfuerzo por encontrar la causa subyacente de los problemas endocrinos ni por explorar posibles soluciones naturales.
En este sentido, incluso cuando se escriben trabajos alternativos sobre el tema, el tratamiento acaba siendo, al final, muy similar al de la medicina alopática. En los EE. UU. existen dos libros muy populares sobre la tiroide. En ellos se ofrece información detallada sobre los trastornos de esta glándula y se presentan varias alternativas. Lamentablemente, ambos libros centralizan sus enseñanzas en las terapia de reemplazo de la tiroides por medicamentos naturales y o sintéticos. Los libros en cuestión son «Hashimoto's Thyroiditis» [La tiroiditis de Hashimoto] de Izabella Wentz y «The Thyroid Connection» [La conexión de la tiroides] de Amy Myers. Dra. La Dra. Myers padecía hipertiroidismo —también llamada enfermedad de Graves—, mientras que la Dra. Wentz superó la enfermedad de Hashimoto y el hipotiroidismo, por lo que ambas especialistas abordan todos los aspectos de la enfermedad tiroidea.
Ambas autoras señalan la necesidad de encontrar la causa de estos trastornos. En este sentido, recomiendan, por ejemplo, adoptar una dieta sin gluten, equilibrar la flora intestinal, reducir el estrés y reforzar el sistema inmunológico. Wentz, en concreto, señala: «La mayoría de los pacientes con Hashimoto e hipotiroidismo experimentarán aumento de peso, reflujos gástricos ácidos, deficiencias nutricionales, anemia, intestino permeable, alergias alimentarias y agotamiento suprarrenal».
Dra. Carolyn Dean, una experta de renombre mundial en suplementos de magnesio y minerales, coincide en que los pacientes con problemas de tiroides pueden sufrir todos estos síntomas descritos, pero no cree que esto se deba necesariamente a un trastorno en la tiroides. Tras casi 50 años de estudio y experiencia personal, la Dra. Dean ha reducido las causas de las enfermedades de la tiroides a su verdadero origen: la deficiencia de minerales y la proliferación excesiva de bacterias, que conducen a un mal funcionamiento del sistema endocrino, lo que siempre implica a la tiroides. Este trastorno también afecta a las glándulas suprarrenales, las hormonas sexuales, el sistema inmunitario, el corazón, los riñones, el hígado, los intestinos y el cerebro.
Sea cual sea la enfermedad crónica que se analice hoy en día, con frecuencia se ofrece una larga lista de todas las afecciones relacionadas con ella, tal y como hacen Myers y Wentz en el caso del hipotiroidismo y el hipertiroidismo.
Por eso, la Dra. Dean ha preferido centrarse en las deficiencias de magnesio y minerales, pues son carencias que afectan a todos los sistemas del organismo. Sin embargo, si se trata cada enfermedad por separado, se acaba recomendando una serie de dietas, suplementos y consejos que resultan abrumadores, confusos y contradictorios.
Una de las causas del hipotiroidismo más difíciles de diagnosticar son los contaminantes ambientales, que bloquean los receptores de la hormona tiroidea. Las hormonas tiroideas pueden incluso parecer normales en los análisis de sangre, pese a que, en realidad, no logran acceder a las células para hacer su trabajo adecuadamente, debido al mencionado bloqueo de los receptores hormonales. Este es el caso de la intoxicación crónica por acetaldehído, que es un subproducto del metabolismo bacteriano. Ocurre algo semejante en el caso de las hormonas femeninas, especialmente los estrógenos, cuyo receptor puede estar bloqueado aun cuando los niveles de estrógenos en sangre sean normales.
En relación con esto, los propios practicantes de la medicina alternativa que relacionan el aumento de la incidencia del hipotiroidismo con las toxinas ambientales no se dan cuenta de que la deficiencia de magnesio puede permitir que las sustancias químicas y los metales pesados gocen de libre acceso a nuestras células, o que las toxinas de origen bacteriano bloqueen los puntos receptores de la hormona tiroidea.
Dra. Carolyn Dean
